Por: Erick Simpson Aguilera
En virtud de la ola migratoria de venezolanos que llegan a Panamá, procedo a explicarles a cierto sector de estos inmigrantes (lo resalto porque no es bueno generalizar y reconozco que es un sector, pero no todos), algunos datos históricos y actuales sobre nuestra idiosincrasia panameña para que aprendan a respetar a sus anfitriones y se comporten decentemente en casa ajena, porque tal parece que a algunos les está costando demasiado adaptarse y aún no asimilan su situación de inmigrantes, es decir, juran que están en su país aún, exigen, insultan, ofenden, discriminan, todo lo critican, y sienten que los panameños les debemos agradecer que invadan nuestro país.
Dicho eso, entramos en materia:
Es cierto que la inmigración de venezolanos en Panamá ha rebasado todos los límites de lo normal al punto de ocasionar malestar y brotes de xenofobia en ambas partes. Reitero, en ambas partes, porque, aunque muchos venezolanos se vendan como las víctimas de la “xenofobia panameña”, los panameños son niños de pecho en cuanto a xenofobia se refiere al lado de ciertos venezolanos que exhalan tanta xenofobia que ni siquiera estando en un país ajeno se pueden contener, lo cual resulta muy tenaz y nos lleva a preguntarnos ¿si se expresan tan ofensivamente de los panameños en nuestra propia casa, cómo sería si estuviéramos en la de ellos?
Cual, si de un pronunciado caso de locura colectiva se tratara, sorprende escuchar a cierta gente de Venezuela referirse a los panameños ofensivamente catalogándonos de monos, negros, indios, flojos y demás epítetos. A lo que yo me pregunto ¿Y cuál es su punto? Ósea, llegan a nuestro prospero país a resolver las carencias hasta de los recursos más básicos que padecen en el suyo que está en ruinas, léase, vienen a Panamá a saciar el hambre profunda que sufren, y todavía se atreven a ningunearnos a los panameños en nuestra casa, pero demostrando su calaña porque tiran la piedra y esconden la mano al victimizarse cuando los panameños reaccionan en malos términos, y entonces invocan la famosa xenofobia de la cual acusan a los panameños cuando si hay alguien xenófobo en la vida, es aquel que ni siquiera siendo huésped en casa ajena puede esconder y disimular sus bajas pasiones, racismo, clasismo y xenofobia en contra de sus anfitriones.
Estimados venezolanos arios de raza pura y superior, permítanme decirles que sí, tienen razón, es cierto, los panameños somos descendientes de indígenas, africanos, españoles, chinos, judíos, árabes, indostanés, etcétera. Y aunque su enferma y estrecha psique los lleve a ustedes a pensar que eso es una desventaja o algo de lo que avergonzarse, permítanme educarlos al respecto: Nuestra tribu indígena originaria Ngöbe-Buglé, se dio el lujo de derrotar al conquistador español Francisco Pizarro que luego doblegó al imperio inca, pero en Panamá mordió el polvo de la derrota infligida por el Cacique Urracá y sus guerreros Ngöbe-Buglé.
De manera que, no nos avergüenza llevar sangre indígena Ngöbe-Buglé en nuestras venas -todo lo contrario, a mucha honra- como demostró el estudio de ascendencia genética de Panamá realizado por científicos estadunidenses y panameños, publicado en The Internet Journal of Biological Anthropology, el cual arrojó el siguiente resultado: El panameño promedio tiene 51% de genes indígenas, 25% de genes europeos, y 24% de genes africanos.
En cuanto a la supuesta ofensa de ciertos sectores venezolanos al tildarnos a los panameños de negros, solo me rio de lo acomplejados que son y me pregunto ¿Y quién ha negado que somos descendientes de africanos también?
Los panameños somos lo que somos y lo asumimos con sus virtudes y defectos, toda vez que, no tenemos complejos de divos ni nos interesa renegar de nuestros orígenes. Allá los arios puros, divos, reyes de la belleza, y seres superiores del sur que viven de esas superficialidades y ridiculeces mientras su país se va al traste.
Los panameños de raza africana siempre han aportado para que nuestro país sea la nación prospera que es, y a la que muchos envidian y aun así se refugian aquí. Desde el tiempo de la colonia, las ciudades españolas en el istmo fueron construidas en su mayoría por mano de obra africana, y luego el canal de Panamá también lo fue.
Lejos de tener un espíritu servil de esclavo, muchos de los africanos que llegaron al Istmo se rebelaron contra sus supuestos amos españoles y se internaron en la selva formando los famosos palenques cimarrones. Nombres como los de Felipillo y Bayano que les dieron guerra y muchos dolores de cabeza a los españoles, destacan ese espíritu panameño que nunca se rinde ante la adversidad. Por eso somos gente orgullosa, porque nuestros genes indígenas, africanos, y españoles también, porque no renegamos de ninguno de nuestros orígenes étnicos, siempre han sido genes de gente guerrera que se da a respetar.
Nuestra nación es una tierra bendita por el Creador, cosa que muchos no entienden y por eso se trauman cuando llegan al país de los indios y negros panameños y ven toda la prosperidad y abundancia que ellos no tienen en sus países “racialmente superiores”. Trauma que no saben administrar porque en sus patrias fallidas les han enseñado toda suerte de prejuicios, entre ellos que los indios, negros, mestizos y mulatos, son inferiores, y por eso no entienden el por qué sus naciones son un desastre y Panamá no para de progresar a pesar de los políticos corruptos que desgobiernan el país.
Aún para los españoles en el tiempo de la colonia, Panamá era un lugar estratégico para llevar a cabo su expansión y conquista del nuevo mundo, toda vez que, desde aquí se adentraron hacia el sur, centro y norte del continente, razón por la cual se celebraban aquí las ferias del oro de Portobelo, y los españoles nombraron a nuestro istmo, Castilla del Oro. Eso es lo que somos nosotros, un país que brilla con luz propia, una nación especial desde siempre, y hasta la fecha con nuestro canal que impactó el comercio mundial y sigue siendo una de las rutas marítimas principales del mundo. Razón por la cual, no vamos a permitir que ningunos fracasados que se las arreglaron para desgraciar un hermoso y rico país como era Venezuela que por sus muchos recursos petroleros debiera ser el mejor país de Latam, pero hoy por hoy es una vergüenza mundial, vengan a ningunearnos y ofendernos en nuestra propia casa.
Sí, yo sé que, como a todo país de Latam, a Panamá le falta mucho aún por madurar, que nuestros indicadores sociales debemos mejorarlos, que existe mucha desigualdad en nuestra nación, y que nuestra clase política además de mediocre es muy corrupta, pero aun así somos el país cuya economía más crece en Latam desde hace más de una década, y por eso no solo venezolanos, pero también colombianos, dominicanos, nicaragüenses, peruanos, españoles, estadunidenses, etcétera, están emigrando a nuestra nación, y no serán unos recién llegados que tienen a un tal Maduro de presidente, y cuyo país está al borde del desastre, los que van a venir a insultarnos y menospreciarnos a los panameños en nuestra propia tierra, cual si tuvieran la moral y el país modelo para atreverse a compararse con nosotros.
A propósito, los venezolanos más problemáticos y bulleros que acusan a los panameños de xenofóbicos, deben preguntarse el por qué en Panamá nunca ha existido conflictos a nivel de la población, en contra de los chinos, judíos, árabes, indostanés, griegos, antillanos, españoles, colombianos, nicaragüenses, dominicanos, etcétera, y solo hizo falta que llegaran los venezolanos para que los panameños de la noche a la mañana, ahora resulte que somos unos xenófobos. No hay que ser muy inteligente para detectar en dónde radica el problema. Ahora entiendo el por qué un país tan hermoso y rico como Venezuela está dividido, carente de paz, convulso, y coqueteando con la quiebra económica y política.
Y no, no estoy haciendo leña del árbol caído ni poniendo el dedo en la llaga; lo que hago es sacudir las conciencias de muchos venezolanos con una buena dosis de realidad porque siguen en negación sin aceptar que Venezuela está así gracias a ellos mismos, no por culpa de los panameños, del imperio yankee, ni de nadie más. Ergo, no nos envenenen a los panameños con sus traumas, divisiones, prejuicios, racismo, clasismo y xenofobia. Reconozcan que de alguna forma los venezolanos se extraviaron del camino y dividieron su otrora rica y prospera nación, hasta dejarla hecha añicos económicamente, convulsa políticamente, insegura y presa de la violencia que campea a sus anchas por todo su territorio nacional, y carente hasta de lo más básico que requiere un ser humano para vivir decentemente.
Nosotros también transitamos por ese camino y ahí es donde se notan las diferencias entre una población y la otra, porque el bloqueo impuesto por Estados Unidos a Venezuela, también nos lo impusieron a nosotros los panameños bloqueando la circulación del dólar y congelando los fondos bancarios, y no andábamos llorando, ni haciéndonos las víctimas, ni atacando a otras nacionalidades en sus propias casas. Nos levantamos del bloqueo económico gringo, de la criminal invasión yankee que dio muerte a aproximadamente 7 mil panameños, la mayoría civiles, y aquí estamos; recuperamos la soberanía en todo el territorio nacional el 31 de diciembre de 1999; y ahora el canal rinde mayores réditos que bajo la administración estadunidense; hecho que ha disparado el crecimiento constante de nuestra economía por méritos propios, y no por la inmigración de venezolanos como algunos ilusos que se auto-engañan vociferan.
A propósito, es un mito el cuento aquel que algunos empresarios y políticos panameños esgrimen de que muchos panameños pidieron refugio en Venezuela en el tiempo de la dictadura militar. El hecho de que algunos de ellos, léase, uno que otro político adinerado, o algún empresario millonario, se hayan exiliado en Venezuela, no es equiparable a la invasión de venezolanos que vive Panamá, la cual es promovida por nuestro vendepatria gobierno que ahora pretende disimular su entreguismo porque se avecinan las elecciones, poniéndoles visas a los venezolanos, cuando lo que el país precisa es una reforma migratoria integral y seria.
Los invito a los difusores de ese mito a que lo sustenten con estadísticas si se atreven, y que calculen el porcentaje de ambos migrantes con relación a la población de cada país, para que no mezclen peras con manzanas ni engañen a los jóvenes que desconocen la historia. Los panameños en su gran mayoría permanecimos en el país durante toda la crisis económica y la invasión, y los que emigraron se fueron en su mayoría a Canadá, no a Venezuela, así que no inventen.
Con relación al otro mito que les gusta a muchos venezolanos que ignorantemente nos dicen a los panameños que les debemos nuestra independencia a un venezolano, a saber, al libertador Simón Bolívar, les recomiendo leer, aunque sea un poco, antes de hablar, que los libros no muerden. Panamá se independizó sola de España; no por iniciativa de Bolívar. Una vez libres de España, no solo la Gran Colombia que dirigía Bolívar, pero también el Imperio Mexicano, y el Perú posteriormente cuando se independizó, les pidieron cada uno por su parte a Panamá que hiciera parte de sus proyectos nacionales, habida cuenta que, todos esos territorios estaban conscientes de la estratégica posición geográfica de que goza Panamá (siempre hemos sido especiales y una tierra codiciable para los imperios, por eso Simón Bolívar quería que Panamá fuera la capital de Latam). Luego, nosotros mismos escogimos entre todas las opciones unirnos al proyecto bolivariano por la historia en conjunto que compartimos con dicha región (Colombia, Venezuela, y Ecuador) desde los tiempos de la colonia española.
En fin, reitero que, aunque muchos venezolanos están desquiciados y desubicados porque llegan a un país ajeno a pedir refugio con dos piedras en las manos e insultando a los nacionales, no todos son así, y me atrevo a asegurar que la mayoría son gente trabajadora y normal que simplemente están luchando por la vida y aprovechando una segunda oportunidad en nuestra tierra; el tema es que los problemáticos, antisociales, desagradecidos, xenofóbicos y racistas, no son 4 gatos tampoco, y están dejando muy mal parados a sus paisanos dándoles una pésima fama que no merecen, y por eso el tema ha escalado peligrosamente.
Ojalá todos los venezolanos fueran como unos vecinos míos que son de Maracaibo, los cuales quizá por su juventud no están contaminados aún. Son unos niños de 11 y 13 años que llegan con otros niños y jóvenes de mi barrio a boxear con el saco que tengo en la casa. Y para esos niños venezolanos y panameños no existen traumas, prejuicios, ni xenofobia algunos; andan para arriba y para abajo juntos; jugando futbol; manejando bicicleta; y haciendo ejercicio; y lo único que ellos saben es que son amigos sin importarles en donde nacieron, y que se divierten juntos. Pero, hay una generación de venezolanos con un importante número de alienados que ya no tienen remedio; están llenos de traumas, racismo, clasismo, xenofobia y prejuicios; y esos son los que están afectando la sana convivencia en Panamá.
Finalizo citando al Libertador Simón Bolívar para que muchos de sus paisanos que ofenden tanto a Panamá y a los panameños, hablando con desdén de un país que les abrió las puertas para que vivan en paz, trabajen, negocien y prosperen como no pueden hacerlo en su tierra que está a punto de colapsar, aprendan a respetar, a ser agradecidos, y a reconocer las virtudes de otros pueblos.
“Los estados del Istmo de Panamá hasta Guatemala formarán quizá una asociación. Esta magnífica posición entre los grandes mares podrá ser con el tiempo el emporio del universo: sus canales acortarán las distancias del mundo; estrecharán los lazos comerciales de Europa, América y Asia; traerán a tan feliz región los tributos de las cuatro partes del Globo. ¡Acaso solo allí podrá fijarse la capital de la tierra como pretendió Constantino que fuese Bizancio la del antiguo hemisferio!
“Qué bello sería que el istmo de Panamá fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos! Ojalá algún día tengamos la fortuna de instalar allí un augusto congreso de los representantes de las repúblicas, reinos e imperios, a tratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y de la guerra con las naciones de las otras partes del mundo”. Simón Bolívar.
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera.
35 pensamientos en “Aprendan venezolanos”
Yexenia
Gracias por escribir desde el alma y con base en la historia, el cómo sentimos y pensamos los panameños con respecto a la arrogancia y xenofobia que tenemos que aguantar de muchos venezolanos que han venido a nuestro país.
Mis saludos más cordiales.
Edgle
Yo creo que hay gente que «ofende por ofender»; y lo más triste es que logra su objetivo! Todas esas ofensas de la que usted habla, se dan a nivel de redes sociales y detrás de un teclado se suelen esconder gente muy envalentonada, que insulta sin base y sin razón. Pero, de que calan las ofensas, calan… Al punto de que gente seria y respetable, se tomen su tiempo para responderle a los desadaptados, y a veces con tanta vehemencia, que se pierde hasta el equilibrio.
Quién puede tomarse en serio que «supuestos» venezolanos tilden de negros o indios a los panameños? Y, digo «supuestos» porque un venezolano de verdad, sabe que el proceso de mestizaje de Venezuela no difiere en casi nada al de Panamá. Qué absurdo!
«La población venezolana en general tiene en su composición genética una contribución amerindia entre un 23 y 25 % del total» (Fuente: https://es.m.wikipedia.org/wiki/Pueblos_originarios_de_Venezuela) Con 34 etnias índigenas en todo el país y 20 lenguas nativas. Por otra parte, Venezuela es el 3er país de Suramérica con más población afrodescendiente (después de Brasil y Colombia), se estima que entre 20 y 30% de los venezolanos, son afrodescendientes. (Fuente: https://m.aporrea.org/actualidad/a127985.html). Conclusión: En Venezuela quien no tiene de indio, tiene de negro… Como decimos popularmente: «Quien no usó guayuco, tocó tambor». Imagínese hasta tenemos un refrán para ilustrar nuestro mestizaje. Por favor, ya dejen de prestarle atención a quienes pretenden ofenderlo con eso! Yo pienso que hay mucho «alboroto» a nivel de redes y el conflicto parece que siempre consigue tierra para el abono. De hecho, el auge de las Redes en Panamá, es de unos cuantos años para acá, así que este factor hace que la situación sea distinta e incomparable con otros otras olas migratorias. Imagínese que en la epoca de Anulfo Arias hibiesen existido redes sociales, que se habría expresado allí de los chinos y antillanos. De hecho nunca antes se habían organizado tantas páginas de promoción de odio y xenofobia, escudadas en el nacionalismo. Hay páginas que se dedican las 24 horas del día, los 365 días del año, a pescar que hace mal un venezolano para hacerlo viral; a tal punto que ya hay personas con complejo de «paparazzis» y algunos hasta inventan, como en el caso del Señor que se orinó en Tocumen. Eso es un fenómeno digno de estudio también! Así que de lado y lado, hay sus locos-radicales. Ójala y los sensatos seamos más! En cuánto a la historia, ciertamente la consumación de la independencia en Panamá fue una gesta local; sin embargo, la historia reconoce que esta no hubiera sido posible sin el debilitamiento español en el Istmo, gracias a la pelea que se daba en el Sur del Continente y que obligó al Imperio a enviar todo su contigencia hacia Colombia, Ecuador, Venezuela, etc., descuidando casi por completo a Panamá. Así que tampoco es que Simón Bolívar y su gesta independentista no representó nada; pues si así fuera no hubieran en Panamá lugares emblemáticos con su nombre. También es cierto que Panamá se unió por voluntad propia a la Gran Colombia y esa unión obedecía a interesés en conjunto; por un lado lo estratégico del Itsmo (incuestionable) y por el otro Panamá siendo un país pequeño temía que España le pudiera reconquistar, por eso le convenía la alianza; así que el beneficio que se buscaba era para todas las partes involucradas; los intereses siempre han movido al mundo! No se puede exigir respeto, irrespetando; ni combatir el odio, con mas odio… A sembrar valores como el respeto mutuo, hacen mucha falta, sobretodo en las redes, de lado a lado, y de extremo a extremo. Saludos!
Erick Simpson Aguilera
Hola Edgle.
En los tiempos de la separación de España, no solo en Venezuela tenían frentes que combatir los españoles, de hecho, en la misma Europa, y acá en México, y el cono sur, también habían frentes en contra de los españoles, lo cual Panamá capitalizó y no es un crédito adjudicable a Bolívar.
Saludos.
Nelson
Me quedé con la boca abierta,al leer tu escrito.(enceñanza)Esto me lo mandó una amiga todo lo que has escrito allí es cierto.Muchas felicidades Dios te bendiga
Daysveliz
Independencia no separación
Rafael Isaza
Respetado Este, justamente tu posición de descalificación permanente, no ayuda a cerrar esta brecha que cada vez es más abismal,tratando de sanjar las diferencias que según ud. son supuestamente inmaginarias para nosotros, deja al descubierto su espíritu y naturaleza.
Desconocer que este problema ha nacido con ustedes, en almacenes, restaurantes, cines, centros comerciales, a gritos, a golpes, en las calles y escuelas, para minimizarlo como una situación encapsulado a las redes sociales, es una mentira que ni ud. se cree.
Solo visite las empresas donde trabajan venezolanos y haga una encuesta del extranjero más repudiado y se dará cuenta.
La arrogancia, el irrespeto, la injusticia, el trato, la ofensa y una característica que usted saca muy bien a flote, la DESCALIFICACIÓN permanente, como dueños de la verdad absoluta, es innegable características venezolana.
He de suponer, que en su país, cuando las clases más desfavorecidas se quejaban de desigualdad social, la clase de arriba se lanzaba grandes escritos para justificar que la existencia de esas desigualdad era inexistente o bien era ocasionada por los mismos pobres.
Pretender minimizar la situación a unos pocos, no solo es mentira, es característico de su arrogancia, de salir a desmentir lo que no se puede ocultar.
Nuestro territorio está compuesto por 30% de reservas indígenas cuando ellos solo representan el 10% de la población, así actuamos acá, ustedes al contrario, aunque tienen una carga indígena importante, no se sienten orgullosos de eso, muy por el contrario, se refieren a los pueblos autóctonos con desdén.
Bolívar lo respetamos por qué fue para el mundo y para América, por eso le hacemos justicia, como siempre actuamos, no por qué le debamos absolutamente nada.
La Gran Colombia representó un atrasó para el desarrollo del Istmo, 80 años olvidados del gobierno central.
Los únicos beneficiados de esa alianza fue la Gran Colombia, Panamá, vivió tal vez su peor época, incluyendo la época española.
Que las circunstancias externas nos hayan ayudado a la independencia, no puede leerse, como que adeudamos al Gran Libertador, nuestra independencia, cuánta arrogancia de su parte y cuánta manipulación de la verdad. Justamente es esa posición suya, que nos tiene enfrentados.
No son las redes sociales que tiene esta división infranqueable, son ustedes los que la mantienen, y los que han dividido su sociedad.
Los Colombianos han vivido una guerra civil de 60 años, pero jamás dividieron su sociedad, como ustedes la suya y quieren exportar ese actuar mal sano.
En su caso, hubiera sido más loable, hablar en nombre de sus paisanos que no creen en esa división, pedir disculpas por los inadaptados, que corresponder al Dr. Eric con su acostumbrada descalificación, por Dios!!!!
Sr. Este, los xenófobos son ustedes, acá no hay nada de parte y parte,que clase de locura es esa.
Ud. llega a mí casa, se sienta en mí mesa, insulta a mí familia y cuando le respondo es que lo atacó???? por Dios!!!!.
Acá, solo reaccionamos y muy muy tarde. Ustedes comenzaron a llegar hace más de 10 años y en ese momento, no sabíamos quiénes eran y como actuaban y los recibimos bien, pero poco a poco se fue creando esta brecha, hasta ahora infranqueable. Por que antes no era así, solo hace 10 años viviamos felices como con todo. Veamos novelas de tu país y amábamos a Ricardo Montaner y Franco de Vita. Ustedes fueron minando esa simpatía, ustedes fueron demostrando quienes eran, que poco respeto sentían por nosotros, que pensaban de nosotros y al final lo natural reaccionamos.
Le pongo este ejemplo: mí hija cursa último año en una, consideró yo, excelente colegio. The Oxford School, con un nivel académico muy alto. Hace poco un compañero venezolano se le pregunta cómo le va en su escuela en Panamá, su respuesta fue: El nivel de inglés aceptable, en lo académico muy mediocre, en Venezuela mí escuela era muy superior.
Ummmm, me pregunté y alguien lo abordó de esta manera:
En tu escuela en Venezuela era bilingüe total, contesta no y tu promedio actual es de??? 4.0 y si vienes con na base tan robusta por qué no eres el primero de la clase???
Esas son cosas que escucha en su casa y se las cree, se cree que todo allá es mejor esa es su característica.
Sea menos arrogante en tratar de disimular una situación que han creado ustedes y en lo personal con sus argumentos que solo se cree usted mismo, no ayuda a resolver
Darwin Mendoza
Sr.Erick mejor se daña,si con esto ellos no reaccionan y se ubican están condenado al rechazo.
Gretta
Sr. Erick Simpson mis respetos para usted. Creo que ha dejado plasmado el sentir de la mayoría de los que hemos nacido en éste pequeño país . Bendiciones!
Franklin Robletto Mora
Muy bien Erick. Excelente opinión. Viva Panamá!!
Itzel
Solo me queda decir bravo por tan sabias palabras
GuadalupeAlmanza
Simplemente maravilloso,felicidades por ser esa voz de tantos panameños.
Amor a la Patria
Magnífico, mucha razón y coherencia, datos muy ciertos
Santiago Saldana Palma
Orgullosa de ser panamena.Aunque no estoy en mi pais,me ofende que algunos Venezolanos sean tan Arrogantes y mal agradecidos.Estoy en USA,y amo y respeto este pais y sus leyes,pues aqui vivimos,y se educaron nuestros hijos.Por eso tampoco estoy de acuerdo con ningun abuso,de extranjeros en el pais que los recibe!!
joseph
Simplemente hermoso
Janeth cedeño
Excelente escrito lástima que no nos guste leer…hoy aprendí algunas cosas nuevas que no sabía…como panameña puedo decir que comparto el punto de vista…y que no me parece justo que cierta cantidad de venezolanos dañen la reputación de sus paisanos…y que si considero hay un desorden migratorio muy grande, y qué pena que las autoridades sean participe de esto.
Norberto Guardia
Felicidades Erick, esto es un resumen exacto de la situación, ojala esto mejore por el bien de todos, Dios te bendiga grandemente.
Erick Simpson Aguilera
Amén. Bendiciones.
José Avila
Como venezolano tristemente tengo que admitir que tiene toda la razón, no faltó ni sobró una coma a su artículo y aunque se deslizaron algunos insultos «elegantes» me atrevo a decir que los merecemos y aunque no me considere parte de ese pequeño pero escandaloso grupo arrogante que anda vociferando estupideces en contra del pueblo panameño, aún sigo siendo venezolano y por ende me duele porque pagamos justos por pecadores. Me tomo el atrevimiento con todo respeto de dejar un comentario, el mito de que muchos emigraron a Venezuela durante el mandato de Noriega tiene algo de cierto, no son muchos como algunos dicen, es irresponsable decir eso cuando es realidad que no fueron muchos los panameños que emigraron a Venezuela, en comparación con los chilenos, italianos, colombianos, etc., pero si conocí a varios panameños exiliados en la ciudad adonde yo crecí y viví por muchos años; médicos, ingenieros, arquitectos, etc., todos profesionales y muy respetados en esa zona, quienes se comportaron a la altura y dejaron el nombre de su país en alto. Por cierto, uno de ellos fue mi suegro, fue militar de alto rango durante el gobierno de Omar Torrijos, profesional, de modales intachables y enemigo de Noriega. Él, mi suegro, fue sacado como perro de su propio país por ser obstáculo para los futuros planes de Noriega, y ahora, algunos años atrás, después de mucho regresó con su hija (mi esposa), panameña también, que ahora sufre las consecuencias de lo que mis paisanos han hecho acá, después de haber esperado mucho por un empleo a la final consiguió, pero su felicidad duró poco menos de un año, porque aunque su sangre es panameña, su acento, su esposo y su hijo son venezolanos y aunque en ese empleo algunos panameños la trataron a la altura, otros (entre ellos su jefa) le hicieron la vida imposible, hasta el punto en que tuvo que renunciar, en el país que tanto defendía ella y del que su padre chiricano tan orgullosamente hablaba, salía por lo menos 2 veces por semana llorando de su trabajo. Es una lastima que ya se esté saliendo todo de control, al punto en que venezolanos que ni siquiera han pisado Panamá hablen mal de ella y su gente, y que un grupo de panameños por venganza ataquen a su misma gente sólo porque tiene acento venezolano, eso se tiene que acabar. Felicitaciones por su articulo. Saludos
Erick Simpson Aguilera
Qué pena José.
En verdad que está escalando peligrosamente este tema.
Siento que tú y tu señora hayan tenido que pagar las consecuencias de un tema que no les compete porque sí han sabido comportase.
Dios quiera que puedan vencer todos los obstáculos y salir a adelante.
Saludos.
Rafael Isaza
Agradezco su solidaridad, lamento qué haya víctimas inocentes y haya injusticia
Constanza de mendez
Sencillamente hermoso fuera de todo contexto en punto y en su punto mejor explícito no pudo ser gran escritor
Emilsa Rios
Excelente sr Erick, felicitaciones, como me gustaria restregarle todo en sus caras, xque dudo que sepan leer, gracias y bendiciones.
Elisa
Muy atinado, es la voz de los panameños. Panamá es grande, su gente auténtica,un país lleno de oportunidades.Tenemos debilidades pero como bien lo dices,nuestra sangre viene de guerreros, de gente trabajadora, estamos orgullosos de nuestras raíces y a el que no le guste que no venga o se retire…Viva Panamá!
María Luisa Palacios de Lares
Soy venezolana, vivo en Venezuela y desafortunadamente estoy muy triste de que en un país hermano como es Panamá, se esté viviendo este drama que acabo de leer. Supongo que por el mal comportamiento de un grupo, es que se vive este absurdo que relata. Esas personas desadaptadas y que fomentan estas situaciones, deben ser deportadas a su país de origen, para que no contaminen el ambiente de convivencia, necesario para que todos puedan trabajar en paz y colaborar en el fortalecimiento del desarrollo de esa gran nación que ha sido generosa y hermana.
Antonio Mola
Sr. Rafael Isaza si todo es mejor en Venezuela, o lo era, por qué sigue en Panamá? Por qué no se mantuvo o regresó a su suelo patrio, regido por traidores a la causa de Bolivar. Si nuestros mejores colegios son inferiores a los de Venezuela, por qué no se quedaron a estudiar allá? Imagínese como sería Panamá si nuestro sistema educativo fuera similar al que describen es el de Venezuela, si con el que tenemos somos el país que más crece en latinoamérica y uno de los mayores en el mundo por más de una década…
No todos los venezolanos son como los que se dan el tupé de insultar y renegar de una tierra que los acogió para que tratarán de tener una segubda oportunidad. Hay muchos que si han demostrado el cariño por esta tierra que los acogió…quizás su pecado es quedarse callados y no hacerle ver a sus conciudadanos la problemática de su corta visión y mentalidad de seres superiores que parecieran padecer de demencia causada por los tristes sucesos que la dictadura de un gobernante en su pais (cuya nacionaludad siempre ha estado en duda): el padecimiento de libertad de expresión (la cual desbordan en Panamá insultando a los panameños en lugar de criticar al gobierno de su país), libertad de circulación, padecimiento de alimentación, salud, una economía en ruinas, etc. mientras los dirigentes o estadistas se enriquecen y desbancan a las otroras riberas del arauca vibrador.
Por qué Sr.Rafael Isaza no le hace un favor a Venezuela y regresa a luchar al lado de esa juventud patriota ha prefirido quedarse en su suelo patrio a luchar por su país a costa de sus vidas? Por supuesto que es más fácil criticar, desde la tranquilidad de un entorno próspero y desde un lugar donde se respira progreso, libertad de expresión y tranquilidad, a la gente que lo acogió en su patria, que estar en el entorno de caos y carencias de una patria a la cual usted prefirió abandonar en lugar de luchar por ella.
Entonces Sr Isaza de dónde viene la arrogancia?
Por què no tiene la humildad del Sr. José Avila, paisano suyo, que escribe y hasta hace críticas con elegancia y humildad?
Los panameños no son xenofóbicos. Nuestra nación se forjo de inmigrantes de toda índole desde hace siglos. Somos puente del mundo corazón del universo desde que hace 60 millones de años las placas del pacífico y del Caribe empujaron el fondo marino creando uno de los acontecimientos mayores al impedir la conexión entre los dos océanos creando lo que es hoy Panamá y creando la corriente del golfo y cambios en el clima mundial. Desde que el conquistador Vasco Nuñez de Balboa descubriera desde Cerro Pechito Parao el océano Pacífico. Desde que el Presidente Theodoro Roosevelt apretó el botón que volvió a unir los dos océanos pero esta vez controlando su unión atravez de un canal en Panamá.
No somos xenofóbicos. Quizás si somos un pueblo cosmopólita con memoria y pantalones cortos, donde lo malo se olvida y lo bueno nadie se acuerda. Como dije en un poema una vez:
O’higgins, San Martin, Simón Bolivar/volverán de sus heróicos sepulcros/ empuñando sus sables de guerrero/gritando:/»libertad por Venezuela».
Cuando este hermoso país recobre su libertad nuevamente, nuestra corta memoria olvidará los injustos epítetos de este pequeño grupo descarriado de venezolanos y volverán los abrazos fraternales…solo espero que sea pronto.
Erick Simpson Aguilera
Hola Antonio.
Me parece que te equivocas. Rafael Isaza es panameño; lee bien su comentario.
Saludos.
Rafael Isaza
Gracias por la aclaración
Rafael Isaza
Gracias por la aclaración, jajajaja, fuego amigo, si fuera la milicia…tranquilo Antonio, no deje que se le nuble la razón
Roca
Excelente recuento histórico, estos caballeros deshabitado, acomplejados y llenos d envidia deben entender d una vez por todas q al llegar a una casa q no es la tuya, respetar se hace una necesidad. Son extremadamente ofensivos al punto d indicar q se van a tomar el país q lo va a Venelizar, sueños d algunos q no entienden q nuestro istmo, nuestro pedacito d tierra es Bendecido por Dios y 100pre estará allí para cuidarnos d todo lo q no sea igual a su perfección
Carmen O. Rodrigues
Bien ponderado su planteamiento Sr., Erick, y estoy segura que no todos son asi, como bien Ud. Lo dice.
Estoy fuera de mi pais, y yo asi lo escogi; respetando sus leyes, costumbres y sobre todo, agradecida por su hospitalidad.
Yo me adapte al pais, no fue el pais a mi. Y si a mi no me gustan sus reglas, entonces soy yo la que me debo mover, y no es el pais, el que se debe mover por mi.
Panama es un pais que siempre se ha esforzado por salir adelante. Somos una mezcla de razas que nunca la negamos y estamos orgullosos de ello. Que pena que si ha alguien que no le gusta esto, siga alli. Entonces, lo que debe hacer es buscar una segunda opcion. Nadie lo hata a uno donde uno no quiere estar, y menos, morder la mano del amo que le abrio las puertas. Primero hay que pagar derecho de piso, correr algunas millas y despues reclamar; pero tan pronto No!
Deseo q esto se supere pronto y en particular, porque esta situacion me toca directo por los lazos consaguineos, que tengo con familiares de ese pais hermano.
Gracias por su reflexion.
Rolando Mirones Leyton
Excelente y muy oportuno. Felicitaciones. Es una exposición de la historia de Panamá y su rol en el mundo.
Erick Simpson Aguilera
Gracias. Saludos cordiales.
Eric Solís Barrios
Mis felicitaciones por tan acertado y por demás bien estructurado comentario producto precisamente de aquellas mentes estrechas y de criterio obtuso, embebidos en alienaciones mentales arcaicas que en nada contribuyen a la pacifica convivencia entre los seres humanos independientemente de cual sea su origen, sexo, raza u orientación religiosa.Mis respetos caballero.
Jose m. Donado s.
Un articulo responsable y lleno de contenido humano.Como panameño me averguenza la situación que hoy sufre el pueblo venezolano,y estando en tierra ajena aún más. Los panameños reaccionamos ante ofensas de cualquiera que llegando a nuestras tierras se exprese despectivamente de lo nacional. No compartimos esta insana posición, la censuramos hoy y siempre. Mantengo amistad profesional con varios venezolanos que radican en mi pais desde a hace algún tiempo. La desgracia que hoy sufre la hermana Venezuela solo tendrá solución si cesa la intransigencia de parte y parte y eso se logra con objetivos y planes claros a corto y mediano plazo. Las izquierdas deben evoluir porque creen que son la panacea destinada a resolver todos los males sociales. Cuanta utopía se riega puesto que nadie en este mundo puede ser autosuficiente sacrificando a todo un pueblo. Tenemos que replantear nuestra politica migratoria. Nadie puede entrar a otro pais sin tener su respectiva visa.Hoy dia por materia de seguridad es obligatorio cerrar la brecha de estos controles. Sencillo, una cosa es venir a invertir y otra a emigrar por fuerza, es de humanos atender el problema de los que salen de sus paises por el motivo que sea, pero debe haber control y atención como mandan los convenios internacionales. Estimado Erick S. Aguilera, continúe nutriendo de sabiduría a quienes nos importan los problemas que impactan en nuestro Panamá, el cual no está vacunado contra los males que son provocados por erráticas políticas de nuestros goberna tes. La autocritica priva por encima del buen sentido.Saludos
Rebeca
Excelente escrito Sr. Simpson !!! Mis respetos y felicitaciones para usted !!!! Haciendo patria grandemente !!!