The Corporation’ es un documental dirigido por Mark Achbar y Jennifer Abbott que durante dos horas y cincuenta y tres minutos se interna en el mundo empresarial psicopático. Está basado en el libro con el título ‘La Corporación, la persecución patológica del beneficio y el poder’, de Joel Bakan. Con entrevistas realizadas tanto a ejecutivos de multinacionales, brokers de bolsa, espías industriales, así como a activistas y pensadores contra la globalización (Noam Chomsky, Naomi Klein y Michael Moore, entre otros) se analiza el comportamiento de las multinacionales. Todo adornado con imágenes de anuncios y noticias de la televisión y videos promocionales de las empresas. La linea argumental consiste en dar por válida la hipótesis legal por la cual una empresa es «una persona» con derechos y obligaciones. Si es así la película se adentra en su comportamiento, su conducta y sus deseos. Amoral, única y exclusivamente motivada por la búsqueda del beneficio propio, no obstante busca la autojustificación y dar una cara humana. Sometiendole a un test psiquiátrico propuesto por la Organización Mundial de la Salud, Joel Bakan demuestra que «La Corporación» responde al perfil de un psicópata, y para testificarlo entrevistan a un alto cargo del FBI especializado en Psicópatas. La película, entre otros premios, ganó el de la audiencia al mejor documental en el festival de cine de Sundance, al que por premura no se presentó, pero fue invitada especialmente y aclamada por el público. A partir de este premio, el autor decidió distribuir libremente la serie por las redes de pares.
En 1903 Phillipe Bunau-Varilla tampoco trasladó a Estados Unidos la propiedad del terreno para el canal interoceánico, tan sólo el uso del mismo. Ricardo Martinelli pasará a la historia haciendo algo parecido.
¿Un nuevo Bunau-Varilla?
Kevin Harrington-Shelton
“Nunca faltará quien diga, Esto sí es algo nuevo,
Pero aún eso ya existió, Siglos antes que nosotros”
—Eclesiastes 1:10
Ahora que vuelven las lluvias, comienza materializar el peligro que viene anunciándose desde hace varios años: en Coclesito se ha desatado una verdadera epidemia de diarrea e infecciones cutáneas, asociadas popularmente con los tóxicos mineros evaporados hacia el aire, que las lluvias ahora precipitan de vuelta a la tierra.
Pareciera que personas en torno a las altas esferas del gobierno fueran accionistas de Petaquilla Gold –una sociedad BIEN anónima– como para que autoridades de salud, medioambiente y Seguro Social se hicieran de la vista gorda en torno a esta mina de un oro cuyo valor exportado anda volando. Y no se trataría ningún funcionario de bajo nivel.
Se recordará que, justo antes de las masacres de gnäbes en Bocas del Toro de febrero 2010, el propio Ricardo Martinelli llamó a su homólogo en Corea para anunciarle con júbilo su promulgación de la Ley 8.
Esta ley “Chorizo” se derogó, pero sólo tras la muerte de estos 5 ciudadanos panameños.
El reciente énfasis mediático sobre la minería se concentró sobre la Comarca, conjurando con ello una (futura) explotación del cobre en Cerro Colorado.
Siempre demasiado sensacionalistas, en nuestros medios ni siquiera se mencionó la existencia de una mina de oro a cielo abierto que ya opera desde hace 3 años en Coclesito, y otra del mismo tipo que se vislumbraba para Cerro Colorado, la que está en pleno desarrollo A espaldas de una opinión pública suficientemente informada.
Pero durante los disturbios de este año no interesó a los medios; ni siquiera a Telemetro Canal 13, quien filmó los bloqueos que presencié –muy civilizados– de campesinos e indígenas en la carretera hacia Petaquilla Gold (y hacia la mina de cobre que desarrollan intereses canadienses, coreanos y panameños, sobre esa misma vía).
Pese a que hubo 7 detenidos, no se le ha dado seguimiento.
Sería la suculenta campaña publicitaria de Minera Panamá, S.A. en casi todos “nuestros” medios, la que justifique su silencio.
Sin olvidar los $150 mil que diariamente pauta el gobierno nacional, so pretexto de información, capaces de callar hasta el más locuaz dueño de medios….
Ahora, justo antes del feriado de Semana Santa que buscaría opacarlo, Martinelli pretende reactivar, furtivamente y a tambor-batiente, lo que ya antes derogó en la Ley Chorizo intentando dar vueltas a una prohibición constitucional contra la participación de gobiernos extranjeros en “nuestra” minería.
Está a punto de promulgar una ley hecha a la medida de Minera Panamá, S. A., donde Singapur y Corea desean financiar el cobre de la canadiense INMET Mining, no hacerse de su propiedad. Curiosamente, entrevistado hoy, el embajador coreano no abordó este hito en nuestras relaciones con su país.
Ello evoca un cierto deja-vú.
En 1903 Phillipe Bunau-Varilla tampoco trasladó a Estados Unidos la propiedad del terreno para el canal interoceánico, tan sólo el uso del mismo.
Ricardo Martinelli pasará a la historia haciendo algo parecido.
Pero con una gran diferencia. En el caso Bunau-Varilla, al recibirse el Canal en 1999, a Panamá le devolvieron una maquinita de hacer dinero; en el caso Martinelli, para cuando la devolución suceda en 2060, nuestros hijos tan sólo recibirán dos huecos enormes en la tierra, mas una amplia franja irremediablemente contaminada que pondrá fin al idílico Corredor Biológico Mesoamericano.
Quienes comemos 3 veces al día estamos en la obligación de velar por quienes no comen, y la mejor forma de hacerlo es promoviendo un estado de derecho que funcione como debe — pensando siempre en el bien común nuestro, y de nuestros nietos.
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El autor ejerce como traductor oficial e intérprete simultáneo de conferencias.
Se permite su reproducción en cualquier idioma en todo medio de todo país (salvo el Reino Unido), a condición de que previamente se solicite autorización escrita del autor solo para cualquier modificación de éste texto original descriptoriummeum@gmail.com«>descriptoriummeum@gmail.com .
De ser ciertos los señalamientos hechos por el Diario La Estrella, según los cuales, en la Academia de Policía de Panamá, se entrenan a oficiales y civiles, para ser exportados como mercenarios y paramilitares al Medio Oriente (Abu Dabi Emiratos Árabes Unidos), para defender oleoductos y rascacielos de ataques terroristas, solo se me ocurre preguntar lo siguiente:
1- ¿Para qué sirve la Constitución Política si, los funcionarios la violentan alegremente y nada ocurre?
Según entiendo, la Constitución Política Panameña, abolió el ejército; de manera que, si el gobierno de turno está remilitarizando Panamá pasando por encima de lo que diga la Constitución, al conformarse fuerzas especiales de elite, que no tienen nada de policiacas, pero si de militares, léase, Fuerzas Especiales (UFEC), y Panacomandos, entonces, de qué sirve la Constitución, si nadie la respeta.
Mejor que se declaren abiertamente en dictadura y no sigamos con la farsa de Constitución, y Estado de Derecho, toda vez que, en la práctica, los gobiernos (incluyendo los diputados que presentan proyectos de leyes inconstitucionales un día sí y otro también), violan la Constitución cada vez que les viene en gana y nada pasa. Así los ciudadanos sabremos a qué atenernos, y actuaremos en consecuencia
2- ¿Cómo se explica que, en Panamá la inseguridad, la delincuencia, los crimines, asesinatos, sicariato, asaltos, atracos, etcétera, continúan in crescendo, al punto que la ciudadanía se encuentra en un estado de indefensión, vulnerable, expuesta y vive con miedo a ser victima de la ola de inseguridad que campea en el país, y sin embargo, por medio de nuestros impuestos, se entrenen a mercenarios y paramilitares en la Academia de la Policía Nacional, para cuidar los rascacielos, oleoductos, vidas y bienes de, los Jeques Árabes y los ciudadanos de Abu Dabi Emiratos Árabes Unidos?
Si tamaño caso de corrupción de ribetes internacionales, cuyas implicaciones atentan directamente contra la seguridad nacional, como quiera que, fuerzas elites con semejante poder de fuego y destrezas militares, pueden poner en jaque a la democracia panameña, cuya Constitución prohíbe la militarización, se hubiera dado en un país serio y democrático donde se respeta la Constitución y las leyes, ya habrían habido algunas renuncias, y separaciones del cargo, para realizar una investigación profunda con resultados veraces. Además, el hecho de entrenar en la Academia de la Policía Nacional, con los impuestos de los contribuyentes, a paramilitares y mercenarios (lo que equivale en cuanto al uso de bienes del Estado, a usar una escuela pública para dictar clases privadas y lucrar de esta actividad, o a usar vehículos estatales como taxis o buses privados), para custodiar vidas y bienes allende nuestras fronteras (pagamos impuestos para cuidar a los árabes, y a los panameños que los parta un rayo) constituye en mi opinión, un delito fiscal (lesión patrimonial) que debe ser investigado hasta las últimas consecuencias.
Es menester que, la Procuraduría tome cartas en el asunto; que sean separados de sus cargos aquellos funcionarios responsables de las carteras a ser investigadas, y que se deslinden las responsabilidades pertinentes de haberlas.
Reitero enfáticamente, de ser cierto lo señalado por el Diario La Estrella, lo mínimo que exigimos como ciudadanos, es una investigación exhaustiva; que se separen de sus cargos a las autoridades a ser investigadas hasta que finalicen las pesquisas; y de comprobarse lo denunciado por el Diario en mención, que los responsables respondan de acuerdo a las leyes panameñas.
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera.
Nota: Según el Diario La Estrella, los mercenarios entrenados en Panamá en el Proyecto Thor, son contratados por la empresa estadounidense Blackwater. Para los que no saben todavía qué es esta empresa y a qué se dedica, les paso a continuación cuatro videos para que se enteren. Además, posteo después de los vídeos, los 2 reportajes del Diario La Estrella.
El Proyecto de Ley N° 438, que modifica algunos artículos del código judicial, sometido para su aprobación a la Asamblea Nacional de Diputados por el Magistrado Presidente de la Corte Suprema de Justicia, Alejandro Moncada Luna, quien dicho sea de paso, fue nombrado como magistrado por el Presidente Ricardo Martinelli (lo cual no constituye delito, ni pecado alguno, no obstante, es un hecho a tener en cuenta), demuestra la involución a que están sometidas las debilitadas instituciones panameñas que, en lugar de ser modernizadas y perfeccionadas en materia de libertades y derechos ciudadanos, son retrotraídas a épocas oscuras que creíamos ya superadas; como quiera que, dicho proyecto delega en la Policía Nacional, atribuciones que, por decir lo menos, asustan bastante; toda vez que, en el articulado concerniente a los allanamientos, se traza el camino para el establecimiento de un régimen policiaco con facultades para violar nuestros domicilios de la manera mas arbitraria. Situación peligrosa que, se puede prestar para que las autoridades de policía cometan toda clase de abusos, atropellos, y persecuciones políticas, en contra de la ciudadanía, los partidos de oposición, sociedad civil, empresarios, etcétera; quienes quedarían expuestos, vulnerables, y en un completo estado de indefensión, ante los desmanes de un gobierno de corte dictatorial que, establezca por medio de tan nefasta ley, una suerte de terrorismo de Estado.
De veraz que, sorprende como después de transcurridos 21 años de la dictadura militar, todavía hay gente en posiciones de poder que pareciera ser que, añoran aquellos días en que las libertades no existían, y pretenden despojarnos de nuestros derechos ciudadanos de vivir en paz, y sin miedo a que la Policía nos tumbe las puertas de nuestros domicilios por simple capricho de algún funcionario malintencionado, o por presiones de tipo político, que buscan intimidar, y acallar voces disidentes.
Sí, ya sé que, algunos pensarán que exagero, que soy alarmista, apocalíptico, y otras hierbas aromáticas por el estilo, sin embargo, después de los intentos del Gobierno de turno por legislar leyes de corte autoritario, léase, la Ley Carcelazo (que amenaza con prisión a las personas que cierren calles en protestas), la Sala Quinta y sus nefastos artículos para restringir el uso de internet (control de acceso y cierre de, redes sociales, blogs, y sitios web), y ahora la Ley Moncada -que aunque en apariencia obedece a una iniciativa del Órgano Judicial, todos sabemos que dicho órgano no es independiente, ergo, dicha ley, pudiera tener otra procedencia- la cual no respeta la propiedad privada de nuestros domicilios, etcétera, uno tiene derecho de pasar de la sospecha respecto a si el gobierno de turno es una dictadura, a tener plena certeza sobre dicho particular.
Ahora bien, usted apreciado lector, no crea cien por ciento en mis palabras acerca del tema en cuestión, toda vez que, las mismas constituyen la preocupación de un ciudadano más, y la opinión no técnica de su servidor que no soy abogado. Razón por la cual, los invito a considerar las opiniones técnicas de los juristas que, procedo a postear en los siguientes tres vídeos. Además, adjunto después de los videos, el Proyecto de Ley N°438, para que puedan documentarse y formarse una opinión acerca de tan nefasta ley (hacer énfasis en la lectura de los artículos 9 y 10 que tratan sobre los allanamientos).
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera.
Eclesiastés 5:8: Si opresión de pobres y perversión de DERECHO y de justicia vieres en la provincia, no te maravilles de ello; porque sobre el alto vigila otro más alto, y uno más alto está sobre ellos.
Siguiendo con el tema de la ola privatizadora del Gobierno de turno, que en pleno arrebato y borrachera de poder, no sacia su apetito voraz de convertir los negocios y patrimonios de todos los panameños, en empresas privadas para beneficio de un minúsculo grupo que se siente dueño del país, y que accede al poder con el único objetivo de lucrar con los bienes del Estado, en detrimento de las grandes mayorías que son marginadas del supuesto desarrollo nacional que solo beneficia a la elite, procedo a facilitarles el comunicado del Frente Amplio Colonense que, se pronuncia en contra del saqueo y expoliación de los terrenos de la Zona Libre de Colón, y el video dónde amplían el porqué de su oposición a tan nefasto saqueo que pretenden perpetrar, los Bunau Varilla modernos.
Despierta Pueblo Panameño, y no permitamos que un grupo minúsculo de “panameños” que no conocen de frenos, ni de limites morales, que no son capaces de procesar y asimilar conceptos como, la solidaridad, honestidad, vergüenza, y amor patrio, se apodere del país entero en nuestras caras, sin que nos demos por aludidos como si fuéramos una suerte de seres indolentes, sin voluntad, espíritu de lucha, dignidad, ni criterio.
Es hora de que, levantemos nuestras voces y nos movilicemos en contra de estos pseudo proyectos inconsultos que persiguen repartirse el país entero, sin invitarnos a la mayoría de panameños (a todos los ciudadanos como debiera ser), a la fiesta.
Mientras el Gobierno nos entretiene con sus cortinas de humo y shows mediáticos de Ministros que “renuncian” irrevocablemente, porque supuestamente el Jefe de la Policía ha atentado contra la institucionalidad democrática del país, pisoteando la constitución y las leyes, al punto de que, hasta se habló del peligro de un golpe de Estado, para después de unos días revocar su renuncia con la excusa del clamor popular para que se mantenga en el cargo, como si fueran tan indispensables (todo lo contrario), sigue a toda maquina la agenda privatizadora del Gobierno actual que, pretende convertir a Panamá entero en una finca privada, en una S.A. y a todos los ciudadanos, en simple peones de la propiedad privada de un grupo minúsculo que ostenta el poder político-económico.
Como fracasaron en el intento de privatización de los sectores de salud, educación, agua etc. cuando el pueblo rechazó en masa el nefasto proyecto APP (Asociación Público Privada), ahora van a por nuestros recursos hídricos (hidroeléctricas privadas), la Zona Libre de Colón, Cable & Wireless, y todas las empresas mixtas en las que el Estado mantiene un importante numero de acciones.
Ante el apetito voraz del Gobierno de turno por privatizarnos el país entero, cabe preguntar lo siguiente:
1- ¿Para beneficio de quiénes y bajo qué criterios?
2- ¿Cuál es el problema o dificultad que ocasiona para el Estado ser dueño de los terrenos de la Zona Libre Colón?
3- ¿En qué perjudica al Estado Panameño poseer acciones en empresas mixtas?
4- ¿Afecta al servicio que presta Cable & Wireless el hecho que, el Estado sea accionista?
5- ¿El comportamiento de los resultados fiscales de las empresas mixtas, representa pérdidas para el Estado, y si no es así, en qué se basa la iniciativa de privatizarlas?
Hasta ahora entiendo que, Cable & Wireless y las empresas eléctricas, representan dividendos para el Estado al final de cada ejercicio fiscal, y los servicios prestados por dichas empresas bajo el formato mixto, son de calidad, de manera que, si no son estos criterios los que sustentan la ola privatizadora, entonces ¿a qué obedece esta iniciativa?
Es increíble el apetito voraz de aquellos que acceden al poder por el voto de confianza otorgado por la ciudadanía, y una vez en el cargo, se olvidan del pueblo, y traicionan a la nación, haciendo gala de un espíritu vende patria que ruborizaría hasta al mismo Bunau Varilla.
A este paso, si el pueblo no despierta de su sueño, cuando abramos los ojos, nos quedaremos sin patria, sin ríos, sin mares, sin montañas, sin Zona Libre, sin empresas claves y sin nada; todo será privado, como quiera que, el patrimonio nacional será vendido al capital privado foráneo y local, y la mayoría de panameños seremos simples peones y extranjeros en nuestra propia tierra, cuando la misma tenga letreros de “No Pase Propiedad Privada” en sus mejores tierras y empresas.
En caso tal que, el pueblo siga con su aborregada mentalidad regetonera y carnavalesca de poco importa, y nos vendan y privaticen el país entero en nuestras propias caras, al menos debemos velar los panameños pensantes para que, se pague por las privatizaciones los precios justos, y que las mismas sean transparentes –no los atracos leoninos que suelen ejecutar los Bunau Varrilla criollos a la hora de vender y regalar el país a sus compinches– y exigir que el usufructo de las privatizaciones sea depositado en el Fondo Fiduciario como un ahorro nacional, de suerte tal que, el producto de las ventas no se diluya en la caja menuda del Gobierno, siendo dilapidado en pago de deuda, y en sobrecostos de proyectos en entredicho en cuanto a su exagerado manejo presupuestario.
Cuando en un país con mucho potencial y riquezas, que es la estrella de la región, cuyo desempeño económico constituye una historia de éxito por llevar años liderando el crecimiento económico regional, que posee uno de los principales centros bancarios de LATAM, que es un hub y emporio multimodal, en virtud del canal, los puertos en ambos océanos (lideres regionales en movimiento de TEUs), ferrocarril transístmico, terminal aeroportuaria de Tocumen (Hub de Las Américas), economía dolarizada, la zona libre Colón (segunda en importancia a nivel mundial, solo superada por Hong Kong), etcétera, el 25.8% de la población, léase 905,591 panameños, viven en la pobreza, de los cuales 442,266 (14%) sobreviven en la pobreza extrema, de acuerdo a la CEPAL, lo que nos convierte en uno de los 20 países más desiguales del mundo, según el coeficiente de GINI que mide la inequidad, no existe la separación de poderes porque, los diputados son mercancía que se compra en el mercado de tránsfugas, y el poder judicial está anulado, e inoperante por ser un apéndice del ejecutivo, y las instituciones democráticas son tan débiles que, en pleno siglo 21, los propios magistrados del Tribunal Electoral, temen que se dé un fraude en las próximas elecciones, y el Ministro de Seguridad renuncia porque el Director de la Policía Nacional que en teoría es su subordinado, se rebela contra las normas democráticas(entre amenazas de Golpe de Estado proferidas por el subdirector de la PN, Eduardo Serracín, según el Diario La Estrella)y es apoyado por el Presidente de la nación, quien en lugar de destituirlo como correspondía, lo premia encargándolo de toda la seguridad nacional, debemos concluir que, algo estamos haciendo mal, y que el sistema político-socioeconómico nacional, no funciona.
Pudiéramos resumir el párrafo anterior en la siguiente máxima:
Panamá es un país rico con todo a su favor para alcanzar el desarrollo integral a muy corto plazo; pero, también es un país repleto de políticos corruptos, con mucha población pobre, y con una institucionalidad democrática maltrecha en cuidados intensivos, donde no existe el Estado de Derecho, ni la separación de poderes, lo que en la practica nos convierte en una dictadura bananera y tercermundista.
Así las cosas, debemos accionar como sociedad, con la finalidad de romper las cadenas que nos mantienen postrados, y a un país entero secuestrado, bajo el yugo de la pobreza y la corrupción.
En mi opinión, debemos trabajar en las siguientes áreas para librarnos de la opresión y alcanzar el pleno desarrollo:
1- Descolonizar la mentalidad sevilista y conformista:
El tema de la supuesta independencia de España y posterior separación de Colombia, no pasa de ser una ilusión incrustada en la mentalidad de los panameños, gracias a una agenda deliberada de nuestro pésimo sistema educativo impuesto por los neocolonialistas que manejan el país, quienes nos han vendido la fantasía esa a la que llaman independencia, llevada a cabo por unos supuestos próceres, cuando lo que en realidad sucedió y subsiste hasta el día de hoy, fue un cambio de amos, un cambio de dueños, y el país ha seguido siendo la misma finca cuyos beneficios explotan unos pocos, y en donde la mayoría no somos libres, sino simple peones sin igualdad de derechos; ergo, no existe la supuesta independencia, y seguimos siendo sometidos por un sistema colonialista y excluyente.
Sí, ya sé que, mis palabras suenan blasfemas para muchos que, construyen sus conceptos en base a leyendas del imaginario colectivo nacional, en base a prejuicios e historias sesgadas escritas por las clases dominantes, sin embargo, su servidor prefiere creer en realidades practicas, por más que mis conceptos atenten contra las vacas sagradas de la historia patria.
Ergo, mientras sigamos con un sistema que margina a las grandes mayorías del desarrollo nacional, para mi concepto, la independencia no se ha llevado a cabo, y no serán los libros escolares de historia, los que determinen mi forma de pensar, sino la vida real y practica que percibo, veo y palpo a nivel nacional, en un país lleno de riquezas para un grupo minúsculo, y lleno de pobreza y limitaciones para las grandes mayorías.
Cuando logremos asimilar este concepto, habremos dado el primer paso para luchar por nuestra verdadera independencia.
2- Descolonicemos la mentalidad clasista:
En Panamá al igual que en toda la América Hispana, existe una tendencia a la negación, surgida del régimen clasista del tiempo de la colonia, cuando el otrora imperio español, clasificaba a la población americana, en base a un ignorante y prejuicioso sistema de castas, a saber:
“Estas principales castas eran las que más frecuentemente aparecen en los documentos legales, como registros de bautismos, casamientos o fallecimientos. Durante el virreinato se llevaba un registro preciso de las castas, cuya importancia llevaba aparejadas discriminaciones o ventajas sociales, al grado que una persona intentaba ser clasificada como una casta mas valorizada. A fines del siglo XVIII llegó a ser posible pagar para recibir unagracia para ser clasificado como blanco en los registros”. Ares Quejia, Berta y Alessandro Stella, Sevilla: Escuela de Estudios Hispano-Americanos.
Es sorprendente como muchas de nuestras acciones, comportamientos, y actitudes actuales, están enraizados en complejos, prejuicios, traumas, y miedos heredados de tiempos de la colonia. Por tal motivo insisto en que, el tema de la independencia, sigue siendo una asignatura pendiente.
Hasta la fecha de hoy, existen panameños con claros rasgos indígenas y africanos que, se rehúsan a identificarse como tales, y prefieren hacer énfasis en la leve cuota de sangre española que tienen, como si esta por arte de magia los convirtiera en mejores personas. Quienes así actúan, son personas atrasadas y acomplejadas que, no entienden que el cuento ese de la superioridad e inferioridad de las razas, no pasa de ser un simple mito y leyenda de mentes anacrónicas ancladas en épocas medievales.
Tener sangre indígena o africana, más que una desventaja, en mi opinión, es una bendición, y constituye el núcleo, la esencia, de lo que es nuestra nación llamada Panamá, como quiera que, somos un país diverso étnicamente y pluricultural, donde la identidad nacional se ha visto enriquecida por culturas y razas de todo el orbe.
Sí, ya sé que, no faltará quien diga, «hace rato sabemos que somos un crisol de razas», sin embargo, una cosa son las trilladas frases que, se pronuncian de labios, y otra identificarse como parte de las razas que se han visto sometidas y marginadas a través de la historia patria, en la vida practica.
Para muestra un botón, ¿cuántos panameños con claros rasgos indígenas, se dirigieron en términos despectivos contra los hermanos de la etnia Ngäbe Buglé, durante el conflicto sostenido con el Gobierno, desconociendo que, ellos mismos tienen sangre indígena corriendo por sus venas?
En lo que a mi concierne, estoy orgulloso de ser nieto de un negro jamaicano por parte de mi Padre, y de tener sangre española e indígena por parte de mi Madre; y nadie me hará sentir menos, porque hace rato que supere esos complejos infundados, y estoy claro en lo que soy, un panameño enriquecido por tres sangres y culturas.
Mientras no rompamos con estas atrasadas estructuras mentales basadas en prejuicios y mitos coloniales, mientras no nos reconciliemos con nuestras raíces, historia y cultura, seguiremos sufriendo de una crisis de identidad, sin saber qué significa ser panameño; seguiremos dispersos y divididos, sin poder construir una nueva nación justa, equitativa, con desarrollo y justicia social para todos, y seguiremos siendo presa de los grupos neocolonialistas que controlan Panamá, quienes pretenden hacernos creer que, ellos son clases superiores, y dueños del patrimonio patrio, para disponer del mismo a su antojo, mientras las mayorías seguimos con las manos vacías.
3- Descolonizar el corrupto sistema Político-Económico:
Panamá es un país manejado por un grupo minúsculo que ostenta el poder político-económico, quienes se han confabulado, para monopolizar y lucrar de la cosa publica, a través de la instauración de un sistema clientelista y corrupto, donde reina el nepotismo, el juega vivo, las prebendas, los sobornos, los negociados, la coima, los sobreprecios, la impunidad, la falta de transparencia y rendición de cuentas, y demás hierbas aromáticas por el estilo.
Muchos de los que hoy se quejan de los abusos y yerros del Gobierno de turno, son quienes cuando pasan de la oposición al Gobierno, cambian de discurso, y todos los desmanes y saqueos a las arcas del Estado, que ejecutan con sus compinches del sector privado –quienes financian sus campañas electoreras (invierten y recuperan con creces)- los justifican y encubren, perpetuando el clientelista sistema político que mantiene postrado a nuestro país en la pobreza y el subdesarrollo.
La única diferencia entre el Gobierno de turno, y los partidos políticos que han administrado el país en la era post dictadura militar, es la tendencia autócrata del Gobierno actual, que se ha dado a la tarea de concentrar todo el poder, pisoteando la constitución y las leyes; pero, en materia de corrupción, no meto la mano en el fuego por nadie, como quiera que, en mi opinión, quedan empate en dicho rubro.
Mientras el sistema político desfasado, colonial, feudalista, clientelista y corrupto actual, no sea erradicado por medio de una constituyente originaria que, nos provea de un nuevo Pacto Social, seguiremos sometidos bajo el yugo de los neocolonialistas que se nutren de la débil institucionalidad democrática, para cometer toda clase de atracos contra las arcas del Estado y abusar del poder, en detrimento de las grandes mayorías que seguirán siendo explotadas y en pobreza.
Aunque, Panamá fuera administrado por el mejor estadista del mundo, por una persona proba, justa, y con conciencia social, sin que el agotado sistema político vigente sea remplazado por uno estructurado y concebido de manera mas justa, moderna, legal, y humana, seguiremos sin alcanzar el desarrollo, y el sistema se tragará a quién quiera que dirija el país, por mas bueno que sea el líder, toda vez que, el mismo sistema está corroído desde sus bases.
De manera que, ya saben lo que tenemos que hacer, si queremos ser verdaderamente independientes, a saber: acabar con los resabios de la colonia.
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera.
Juan 8:32 Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Por los vientos que soplan, la crisis institucional que vive Panamá, está tomando ribetes peligrosos, toda vez que, según las palabras del propio Mulino, su renuncia obedece a una disputa con su ex subordinado, el Jefe de la Policía Nacional, Gustavo Pérez, quien en opinión de Mulino, además de irrespetarlo como superior, tuvo un proceder ilegal e inconstitucional que atenta contra la institucionalidad democrática del país.
Como hemos venido señalando desde hace rato, el clima político institucional en Panamá, está muy enrarecido, y no hay semana en que no estalle una nueva crisis en el Gobierno, sumiendo al país en la zozobra, el caos y al borde de la ingobernabilidad.
Me preocupa en extremo que, las palabras del Señor Mulino sean ciertas, como quiera que, de ser veraces las mismas, estamos ante una Policía que pesa más que el mismo Gabinete, lo cual no es propio de un Estado de Derecho, más sí, de una dictadura; situación peligrosa que, por decir lo menos, asusta bastante.
Amanecerá y veremos como termina esta nueva crisis que estalla precisamente ahora que, el propio ex ministro José Raúl Mulino, y la Policía Nacional, están siendo cuestionados por supuestamente cometer abusos de autoridad y violación de derechos humanos, durante la represión propinada por la Policía, a los indígenas Ngäbes Buglés que protestaban por el tema hídrico-minero; el cual cabe destacar, no ha sido resuelto y Dios quiera que, no vuelva a estallar.
La Película Oro azul – La guerra del agua, es un impactante documental sobre el tema de la escasez de agua en el mundo y los intentos corporativos por controlarla, el cual comparto con mis estimados lectores, por ser un tema de mucha vigencia e importancia. Espero que les resulte útil para formarse una opinión sobre el particular.
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera.
«En el futuro las guerras no se librarán por el petróleo, sino por algo mucho más básico y necesario para la vida: el agua. Gigantes corporativos, inversores privados y gobiernos corruptos compiten ya hoy por el control de nuestros suministros de agua fresca que cada vez son más escasos. Este documental, basado en el conocido libro Oro azul de Maude Barlow y Tony Clarke, demostrará cómo el planeta se acerca rápida y peligrosamente a una crisis mundial por el agua, mientras la fuente de vida por excelencia entre a formar parte de un mercado global y sea asunto de disputas en la arena política».