Por: Erick Simpson Aguilera
La democracia no es el silencio, es la claridad con que se exponen los problemas y la existencia de medios para resolverlos. Enrique Múgica Herzog Político español
¿Cómo se denomina a un país en el cual el Ministerio Publico no investiga sin el aval del órgano ejecutivo, donde la Asamblea de Diputados en lugar de ser un centro del saber y el debate público en aras de lograr las mejores leyes en beneficio del país, es un apéndice del órgano ejecutivo lleno de tránsfugas, yesmen, y gente no muy pensante que digamos, quienes cual fieles subordinados aprueban a pie juntillas, todo lo que el presidente de turno les ordene, independientemente del beneficio o perjuicio de dichas leyes, dónde el órgano judicial es una suerte de agencia del ejecutivo en extremo inoperante, e inerte que solo cobra vida cuando de perseguir enemigos políticos del gobierno de turno, o de ganancia monetaria deshonesta producto de torcer las leyes, se trata, donde el Fiscal Electoral es un personaje mitológico del que muchos dudamos de su existencia, y donde la Contraloría es una oficina de contabilidad del órgano ejecutivo cuyo accionar está lejos del propósito que por constitución le compete?
Algunos responderían que, un país así tiene el perfil de una Banana Republic manejada por un dictador cual si de una finca privada se tratara. Otros responderían que, de pronto países como Cuba, Venezuela y Ecuador, llenan el perfil descrito a cabalidad. Y habrá quienes opinen que, esos tiempos ya fueron superados en Latinoamérica, y que estamos viviendo en otra época donde reinan la libertad, y la democracia, como quiera que, a excepción de Cuba, en todos los países latinoamericanos el voto popular ha otorgado el mandato a los presidentes de turno, lo cual es cierto, sin dejar de ser cierto también que, el hecho de haber ganado una elección no garantiza que, durante el mandato del gobierno electo, no habrán desvíos de la senda democrática, ni que no se violaran las leyes de la democracia en el trascurso del mandato otorgado por los votos.
Sea como fuere, el tema es que, en mi opinión personal, nuestro país llena la descripción comentada a cabalidad, y hasta me atrevo a afirmar que, en Panamá estamos sufriendo una dictadura civil que ha subordinado a todos los poderes del estado bajo el dominio del órgano ejecutivo; y si todavía no estamos en una dictadura civil, pues nos falta muy poco para estarlo.
Ahora bien, puede ser que su servidor esté equivocado, toda vez que, no tengo el patrimonio de la verdad, de modo que, de pronto estoy viviendo una película de mi propia mente y en Panamá todavía existe la separación de poderes y la institucionalidad democrática. No sé, de pronto soy un alarmista e idealista que no entiende que, Panamá es el país que más crece en Latinoamérica, que aquí no hay presos políticos, que existe libertad de expresión, y que debo conformarme porque estamos mejor que Cuba, Venezuela, Ecuador, etcétera, donde las libertades ciudadanas si han sido violentamente vulneradas.
Sin embargo, yo no vivo en Cuba, Venezuela, ni Ecuador, vivo en Panamá, y me preocupa el rumbo que están tomando las cosas en nuestra nación, toda vez que, un gran crecimiento económico, mezclado con una gran pobreza general y extrema, con una gran desigualdad, con una educación y salud paupérrimas, y con una corrupción gubernamental galopante, me resulta un coctel muy peligroso que nos puede estallar de un momento a otro, sumiendo al país en la ingobernabilidad e inestabilidad, dando al traste en consecuencia, con la bonanza económica.
Bien, ustedes dirán estimados lectores, si su servidor está en lo correcto o no, y respetare sus opiniones, no obstante, hasta que el gobierno de turno no se maneje con la debida trasparencia y rinda cuentas respecto del escándalo internacional del RADAR GATE, y hasta que la Contraloría y el Ministerio Público no digan ni esta boca es mía, seguiré opinando que estamos en una dictadura civil. En virtud que me pregunto ¿en qué país serio y democrático donde se respeta la separación de poderes, se puede ocultar las especificaciones técnicas de un contrato del que se presume está viciado por un sobreprecio millonario que pudiera representar una lesión patrimonial del orden de 89 millones 955 mil 108.56 dólares?
En qué país serio y libre el Ministerio Público permanece inerte en un caso como el citado, no obstante conocerse el pago de una comisión del 10% a una empresa intermediaria que no tiene ninguna razón de ser en este trato entre dos estados (dónde están los asesores y “genios” del gobierno que para comprar radares necesitamos pagarle B/. 33,300,000.00 a una empresa intermediaria tercera salida de la nada).
Que el MP demuestre que es un ente independiente y diga presente, que demuestre que no estamos en una dictadura civil e investigue al ejecutivo, que examine las especificaciones técnicas del equipo comprado por Panamá y las confronte con las del comprado por Turquía y las publique a la sociedad civil, que los panameños queremos ver su accionar independiente y descartar que esa “independencia” es un mito como sospechamos.
Resultados es lo que exigimos, y máxime cuando conocemos el escándalo de proporciones mayores que se ha desatado en Italia por el mismo caso que nos ocupa, aunado al hecho de que el artífice de la trama es un extorsionista prófugo de la justicia italiana (Valter Lavitola) que se dió el lujo de refugiarse en Panamá, y sin embargo, la reacción de nuestras autoridades competentes respecto a tamaño caso de corrupción, ha sido, bien gracias y usted.
En fin, seguiré opinando que vamos mal en materia de institucionalidad democrática, hasta que casos como el de los radares y Juan Hombrón, no se deslinden y los responsables –de haberlos porque respetamos la presunción de inocencia, aunque la inacción de las autoridades da muy mala espina- sean llevados ante la justicia como corresponde en un estado de derecho donde se respeta el imperio de la ley.
Saludos cordiales.
Erick Simpson Aguilera
La tiranía totalitaria no se edifica sobre las virtudes de los totalitarios sino sobre las faltas de los demócratas. Albert Camus (1913-1960) Escritor francés.
3 pensamientos en “Radar Gate”
Eric H. Herazo B.
Sabemos bien q mientras Mafiarelli este en el poder nada va a pasar, aqui no tenemos, contraloria, no tenemos ministerio publico, q fueron a hacer los titeres del tribunal electoral al bebedero, a cobrar los jugosos viaticos y a mirar para otro lado durante las irregulares cometidas antes, durante y desoues de la escogencia de la candidata del cd, pero como todos son unos sometidos del delincuente mayor, tomemos el ejemplo del vecino costa rica q ha enjuiciado ex-presidentes y funciinarios, pero a los sometidos les faltaalgo o los tienen de adorno, si fueran honestos e independientes los funcionarios de marras arriba mencionados, aqui estuvieran presos minimo: bonissi, almengor, maria cristina, salo el limpio, la desalmada de mi primer millon, digo mi primer empleo, el honorable mulino y no sigo porq no acabo, pero q v a, por ahí andan tranquilo paseandose con too lo robado y aqui no ha pasado nada, que trsteza lo q estan haciendo de nustra querida PANAMA.
rafael
Es una dictadura. No tenemos certeza de que haya un traspaso legal del poder en 2014. El Bebedero dio señales contrarias.
erick507
Que duro reconocerlo Profesor, pero así es, estamos ante una dictadura civil que utilizará todos los recursos del estado para perpetuarse ilegalmente en el poder, y creo que no somos los únicos que opinamos así respecto al gobierno de turno.
Saludos.